lunes, 31 de marzo de 2008

Ruta de Mones a O Bolo,A Veiga, Xares y Prada

RUTA DE MONES A O BOLO, A VEIGA, XARES Y EMBALSE DE PRADA.
Salimos de Mones, pasamos por Petín, Freixido, A Portela, Portomorisco y Lentellaís. En este último lugar, nos desviamos a la izquierda para subir a O Bolo.En la parte más alta de O Bolo, se encuentra el casco antiguo: casas con escudos nobiliarios, plaza con galerías acristaladas, torre del antiguo castillo, construido, probablemente, en el siglo XV, sólo queda la torre de homenaje, de planta cuadrada, así como algunos restos de la muralla, y la Iglesia de San Martín, a cuya torre se sube por unas escaleras empinadas. Desde el campanario, se contempla un dilatado horizonte y unas bellas perspectivas: Cabeza de Manzaneda, Boca de Quiroga, Sierra de Cereixido, A pena Forcada, Alto de Cobelo, verdes praderías, bosques de robles, multitud de pueblos serranos.
El día 8 de cada mes hay feria en O Bolo.

Volvemos a la carretera general, dirección Viana do Bolo y A Gudiña; dejamos a la derecha As Ermitas y a los pocos kms, nos desviamos a la izquierda con dirección A Veiga. En todo este trayecto contemplamos bellos paisajes, praderías y bosques, principalmente, de robles.

Un poco antes de llegar A Veiga, nos encontramos con un bello paraje: una zona de recreo y baño, desde la que se contempla el embalse de Prada y las casas de A Veiga con sus tejados de pizarra. En A Veiga hay ferias los días9,17 y 29 de cada mes. De A Veiga nos dirigimos a Xares.
PUEBLO DE XARES

Xares se encuenta situado en el oriente orensano, en la falda del mazizo montañoso de " Peña Trevinca, de 2124 metros de altitud, pico más alto de Galicia.
IGLESIA DE XARES

Xares está regado por el río truchero, Xares.

RÍO XARES


la Iglesia es del siglo XI(1010), reformada en el siglo XVI. Tiene planta en forma de cruz patriarcal, típica del estilo románico. Su fachada es neoclásica. En ella, se conserva una monumental cúpula con su linterna. Guarda libros de registros parroquiales del año 1583, así como una cruz del año 1624, donada por el capitán Alonso Ponce de León.

Todavía se conservan en Xares varias fuentes, algunas de origen celta y muchos antiguos molinos en buen estado; alguno se sigue utilizando hoy en día.
CASAS DE XARES

Sus viviendas son típicamente rurales y de alta montaña. Están construidas en sillar o sillarejo visto, con cubierta de losa bruta.
SENDERISMO A CABALLO

Como apoyo a las rutas de senderismo, Xares cuenta con viviendas rurales que han sido rehabilitadas para el alojamiento del turismo rural.estas viviendas todavía conservan un gran número de telares y gran cantidad de prendas de lino, muestras únicas de la antigua artesanía de la zona.

GASTRONOMÍA: Cabrito y cordero asado,chorizos y androllas caseras, jamón, lacón con grelos, pulpo y empanada, la exquisita trucha del Xares y la abundante caza de sus montes.

Xares cuenta con numerosos valles de gran belleza y frondosa vegetación: roble, abedul, acebo, avellano, enebro...también existen multitud de plantas medicinales y de interés botánico: arándano, zarzamora, genciana...
HOTEL EL CIERVO

HOTEL EL CIERVO. Confortable y distinguido hotel de tres estrellas y alta montaña. Aquí, el viajero podrá encontrar un ambiente familiar y tranquilo, imprescindible para disfrutar muy cerca de la naturaleza. Cuenta con instalaciones modernas, equipadas y confortables en medio de un ambiente rural y autóctono.

COTO DE CAZA. Se trata de una superficie de unas 2.000 hectareas y que comprende los montes de" Acevedos" y " Morteiros", destinados a caza mayor: venado o ciervo,corzo, jabalí...

Xares cuenta con una indudable riqueza faunística: lobo, zorro, marta, garduña, gineta,nutría, tejón,comadreja, armiño y turón.Entre las aves rapaces diurnas: gavilán, ratonero común, aguilucho pálido y cernícalo vulgar. Entre las rapaces nocturnas: cárabo común, mochuelo y la lechuza común.

RUTAS: RUTA DE LA RESERVA Y RUTA DE a MORTEIRA, en las que se puede ver venados, corzos, jabalíes, cabras montesas y muflones.

Para finalizar nuestra ruta, nos dirigimos al Embalse de Prada, pasando por varios pueblos serranos y frondosos bosques de robles.El embalse de Prada llega hasta más allá de A Veiga, con 11 kms. de largo. Lugar ideal para la pesca y, con los permisos necesarios,para los deportes náuticos, en medio de bellos paisajes en ambas orillas. Este embalse sepultó bajo sus aguas al pueblo de Alberguería: cuando está bajo de aguas, todavía, se observan sus fantasmales casas solitarias y abandonadas. Si decimos bajar a la central hidroeléctrica, comtemplaremos un paisaje montañoso, bravío donde los haya, pero lleno de encanto: un laberinto de picos agudos, bordeando el río Xares. Al fondo, las casas de Agualta y el embalse de Santaolaia; en primer plano ,solitario, entre sotos de centenarios castaños, el Santuario del Cristo de la Ascensión de Prada.









viernes, 28 de marzo de 2008

Ruta de Mones a Roblido y Montefurado

RUTA DE MONES A ROBLIDO Y MONTEFURADO

Distancia, aproximada: 32 kms, ida y vuelta.
Tiempo: 50 minutos, ida y vuelta.


MONTEFURADO


Salimos de Mones por Os Barredos, contemplando los huertos y viñedos, los sotos de centenarios castaños de Acosta y el valle de A Rúa.
A la entrada de A Rúa, nos desviamos a la izquierda para enlazar con la carretera N- 120, que va a Quiroga, Monforte de Lemos y Orense. A escasa distancia, dejamos esta carretera para desviarnos a la derecha y subir hasta Roblido. Desde aquí, la vista panorámica impresiona. Como águila que señorea los cielos, tenemos a nuestros pies todo el valle del Sil, tan rico en viñedos, huertas y frutales y las villas de O Barco, Villamartín, A Rúa y Petín. Contemplamos, de frente, las estribaciones de la Sierra del Eje ( Eixe) y los pueblos que se ubican en sus laderas, como Mones, Sampaio...; detrás de nosotros, la Sierra de Cereixido, Cejiño,La Encina, La Lastra y Goladón. Ciertamente, desde aquí, se domina, prácticamente, toda la comarca de Valdeorras.
Regresamos a la carretera general,N-120, para dirigirnos a Montefurado y contemplar la obra de romanos en el monte y como obtenían el oro de las arenas del río Sil.

Los romanos hicieron, en esta parte de Galicia y en la zona del Bierzo, en la provincia de León, canales de conducción de agua que eran verdaderas obras de ingeniería. Recordemos, entre otros, el canal de Masdeu o de Mendón.
El canal de Masdeu o de Mendón, obra de romanos, llevaba las aguas del Jares ( Xares) por encima de Portomourisco (A Portela) y por cerca de Larouco y de Seadur, hasta las explotaciones mineras y lavaderos próximos al Sil, y al Forum Gigurrorum, con un recorrido de más de 18 kilómetros. Las arcillas rojizas en la ladera y los montones de canto rodado denuncian el objetivo de estas notables obras ( el beneficio del oro).


Según D. Manuel Díez Sanjurjo. Boletín de la Comisión de Monumentos de Orense. Tomo II. Pág. 322 y 323.

“Toda la parte alta que separa la Rúa de San Miguel de Otero, formaba un sendero romano, cuyos canales de desagüe hemos cortado con las obras de la carretera de Ponferrada a Orense, y pasado el mesón antiguo de la Rúa pueden verse los cortes de los canales tallados en pizarra, hoy rellenos de arcilla y canto rodado con un ancho de cincuenta centímetros. En el fondo de aquellos, se ha encontrado la arcilla roja que era objeto preferente de sus lavados para la extracción del oro. El agua que utilizaban para esta operación venía de los arroyos de San Miguel de Otero y de Villamartín por unos canales de los que aun se ven vestigios, y estas obras son las que quizás han podido ser parte a la confusión de su trazado con el de la vía, por más que ni por el ancho ni por la inclinación, que es pequeña relativamente y mantenida constante en el sentido que corren las aguas, puede ser admisible. Estas obras hidráulicas de aquella época son frecuentísimas en esta provincia, y para convencerse de ello basta decir que sólo el trayecto desde Larouco hasta Otero encontramos las siguientes: El canal de Mandeu, que lleva aguas del Jares hasta las explotaciones mineras y lavaderos próximos al Sil y al Forum Gigurrorum. Para surtir los baños a que pertenecía el mosaico citado ( Lápida dedicada a L. Pompeyo Reburro Fabro) existente aún hoy, aprovechada para riegos, una acequia perfectamente trazada, que hemos recorrido en varios kilómetros. A manera de pantanos, para retener las aguas, hay unas excavaciones sobre la Rúa, más arriba del arroyo de San Julián. Y, por último, las obras mencionadas para los lavaderos entre la Rúa y San Miguel. Es, pues, cosa corriente que lo que se hacía en gran escala en las Médulas, conduciendo las aguas de las vertientes del Teleno, se repetía en pequeño todas las veces que era preciso, no sólo para explotaciones mineras, sino para otros usos del agua; y por tanto, así como es muy común encontrar en esta provincia los montones de canto rodado que denuncian la existencia de un lavadero, es también muy frecuente encontrar en el terreno restos de los respectivos canales. No se debe extrañar que así suceda, pues dada la pequeña proporción con que se encuentra el oro en el mineral que ellos explotaban , y las grandes cantidades de este metal que, procedentes de esta región en particular, entraban en Roma, la actividad de explotación debía ser inmensa”

Yacimientos auríferos en la cuenca del río Sil en Valdeorras.

En este apartado resumimos el trabajo de Santiago Ferrer Sierra.


“A PALA”, en Somoza, ayuntamiento de A Rúa. Sistema de explotación, “ ruina montium”. Captación de agua en el arroyo de A Rúa.

“ O BURACO”, en San Paio, ayuntamiento de Petín. Es una explotación primaria en la que se utilizó el sistema alterno de fuego y agua. Captación de agua en el arroyo de Olivedo.

“ VALDEGODOS”, cerca de Vilamartín de Valdeorras. Sistema “ ruina montium”. Captación de aguas en el río Leira y arroyo de San Julian.

“ AS BARREIRAS”, en Córgomo, ayuntamiento de Vilamartin de Valdeorras. Sistema “ ruina montium”. Captación de aguas en el río Leira y arroyo de San Julian.

“ A COBA DOS MOUROS”, en Arcos, ayuntamiento de Vilamartín de Valdeorras. Es una explotación primaria. Sistema , galerías.

“O PEDRAGAL”, en Portela, ayuntamiento de Vilamartin de Valdeorras. Sistema de explotación “ ruina montium”. Captación de aguas, arroyo de San Julian.

“ AS COBAS”, en O Barco, ayuntamiento O Barco de Valdeorras . Sistema “ ruina montium”. Captación de aguas, fuentes que nacen por debajo del monte Xirimil.

“ AS COBAS”, en Entoma, ayuntamiento de O Barco de Valdeorras. Sistema de explotación, “ ruina montium” . Captación de aguas, río Galir.

“ O FORROXAL”, en Entoma, ayuntamiento de O Barco de Valdeorras. Sistema “ ruina montium”. Captación de aguas, río Galir.

“ A RAIA”, en Entoma, ayuntamiento O Barco de Valdeorras. Sistema “ ruina montium” . Captación de aguas, regatos que nacen en arroyos por encima de Sobradelo.

“ A MEDUA”, ayuntamiento de Carballeda de Valdeorras. Sistema “ ruina montium”. Captación de aguas, río Casoio

“ A MEANA” , en Quereño, ayuntamiento de Rubiana. Captación de aguas, arroyo Foi Pedriño.


Lavaderos antiguos en la cuenca del río Sil.


“Los romanos no se contentaron con beneficiar el oro que podían hallar en las formaciones filonianas; extendieron el campo de trabajo hasta explotar, en gran escala, los aluviones y conglomerados que abundan en la región, pudiéndose comprobar la existencia de lavaderos antiguos en la mayor parte de la formación diluviana del N.O de España. En la cuenca del río Miño, con sus afluentes, se hallan la mayor parte de estos lavaderos, en los puntos que a continuación citamos:

… Río Sil.- En Villablino ( León), en Oreallo, Páramo del Sil, Cuevas del Sil, Palacios del Sil, Toral de los Vados, entre el Sil y el Burbia, en Carril, y desde el puente de Domingo Florez hasta más abajo de Quiroga y Montefurado.” 4.


PROCEDIMIENTOS DE EXTRACCIÓN DEL ORO, UTILIZADOS EN EL RÍO SIL Y EN MONTEFURADO



BATEO. Es el sistema más antiguo, época prerromana y, a la vez, también el más moderno, pues, actualmente, se sigue utilizando. Igualmente es el más sencillo de los sistemas de extracción para beneficiar yacimientos auríferos. “Se ha practicado siempre según el mismo procedimiento. Se extraen las arenas fluviales y se eliminan los materiales más gruesos mediante un cribado. A continuación se introducen en un recipiente de forma cónica o batea a la que se imprimen movimientos giratorios, a la par que se dejan salir los materiales más livianos, hasta que en el fondo de la batea sólo quedan los fragmentos de los minerales más pesados, oro incluido”. En la década de los treinta del siglo pasado, según el geólogo G. Schulz, unas 300 aureanas y oureiros trabajaban en Valdeorras y Ribas de Sil durante el verano, siguiendo este procedimiento, obteniendo del río Sil una producción que les dejaba unos 100.000 reales, lo que equivaldría a 2.470 - 2.875 gramos, aproximadamente; es decir: cada aureana conseguía unos 12 - 14 gramos de oro por campaña estival. La técnica que utilizaban era la empleada por las mujeres del pueblo galaico de los ártabros o arotebras, según relata el geógrafo romano Estrabón en su Geografía. La construcción de embalses y pantanos, la emigración y la subida del nivel de vida son las causas del abandono de esta explotación artesanal.


SISTEMA MONTEFURADO ( Lugo). Los romanos desviaron el curso del río Sil a través de un túnel de unos 110 metros, aproximadamente, horadado en la roca, explotando intensamente los aluviones, ya secos, de un meandro encajado.

jueves, 27 de marzo de 2008

Ruta de Mones a Santa María de Mones, Oporto y Outeiro

2.- RUTA DE SANTA MARÍA DE MONES



Lugares: Mones, As Fontelas, Santa María, Oporto, Outeiro.

Distancia: 7 km. , aproximadamente,

Desnivel: 414 m.

Tiempo estimado: 2h. 30´.


Salimos de San Miguel de Mones por Os Barredos, contemplando las magníficas vistas de los sotos de castaños de Acosta, el Valle de A Rúa y los pueblos ubicados en las laderas de las montañas. Después de pasar por As Fíntelas, pueblo actualmente abandonado y sepultado por el bosque salvaje que allí se desarrolla y donde, en tiempos pasados, algunos vecinos de Mones tenían sus bodegas de vino, nos dirigimos a Santa María de Mones, dejando, a la izquierda, Balbarrán, poblado anteriormente por viñedos y donde hoy crece el bosque de matorrales.
VISTA DE SANTA MARÍA DE MONES EN PRIMER PLANO

En Santa María de Mones, en la cumbre de la colina, en lo que fue castro celta, utilizado posteriormente por los romanos, se levanta la antigua iglesia de Santa María de Mones, posiblemente construida en el siglo XII, en el lugar que , quizá, fue monasterio de templarios . La construcción es de piedra granítica y está rodeada de viñedos y tumbas. La iglesia, bien conservada, parece una fortaleza, con una interesante fachada. En su pared sur, todavía, se conserva una piedra grabada con un juego romano, “ tres en raya”. Se ilumina durante la noche, destacando su silueta, visible desde el valle de A Rúa, Petín y pueblos de las estribaciones de las montañas. La belleza del paraje, la dilatada perspectiva que pone, a los pies del caminante, el río Sil con el embalse de San Martín y el hermoso y fértil valle de A Rúa, poblado de viñedos, y las montañas que le circundan, impresiona la sensibilidad del visitante.

La carretera, después de pasar por las bodegas donde, en otros tiempos, guardaban el vino los vecinos de Santa Olaia, baja empinada pendiente, cruza el, antaño caudaloso y bravío, en invierno, arroyo de Oporto o de Acosta y sube un repecho en el que se encuentran las casas de Oporto. Luego , siempre entre viñedos, discurre por una suave pendiente hasta el poblado de Outeiro, pasando antes por las bodegas llenas de grandes cubas en las que se guarda fresco el vino de la cosecha. En Outeiro, además de disfrutar de una hermosa vista panorámica, podemos contemplar el Pazo de los Mancebos y, a la vez, recordar el pintoresco episodio de la Guerra de la Independencia acaecido en este lugar: un criado, que pasaba por imbécil, emborrachó a los soldados franceses que, acampados en la ermita de San Roque de A Rúa, cometían toda clase de asaltos y atropellos en los pueblos del entorno. Los vecinos aprovecharon esta circunstancia para agredir a los borrachos soldados que así tratados recordarían de por vida aquel día y aquellos hechos.


martes, 25 de marzo de 2008

Ruta de Mones a O Barco

RUTA DE O BARCO DE VALDEORRAS

DISTANCIA: 20 km.
TIEMPO EN COCHE: 25 MINUTOS

VISTA DE O BARCO DESDE EL PARADOR

O Barco de Valdeorras es la capital de la comarca de Valdeorras y está situado en el Valle del río Sil, en la parte oriental de la provincia de Orense, rodeada de montañas y a 330 metros de altitud.
O BARCO, PORTO DA BARCA

El origen documental es relativamente reciente. En el siglo XVI, aparece citada en torno a la ermita y hospital que en honor de San Roque funda un caballero de Villafranca , llamado Juan Giral. Hasta 1666 se llamó O Barco de Viloira , y el origen de su nombre quizá tenga que ver con la barca que permitía el paso de gentes y mercancías entre una orilla y a la otra del río, a la altura del embarcadero de la calle Real que se conoce como Porto da Barca.

El municipio , en el año 2005, contaba con 13.700 habitantes, casi todos residentes en O Barco.

Su tradicional ocupación agrícola ha ido dando pasos a los derivados de la explotación de la pizarra, para la construcción, y al sector servicios. De las 400.000 toneladas de pizarra anuales que se elaboran, la mayoría son para exportación.

O Barco centraliza los servicios administrativos comarcales de la Xunta de Galicia, la Administración Tributaria y la ITV.

Cuenta con el Hospital comarcal de Valdeorras y Centro de Salud, guarderías, colegios de Primaria, Instituto de Bachillerato y de Formación Profesional, Conservatorio de Música Elemental, , importantes equipamientos: deportivos, ocio y cultura, campo de fútbol, pistas de atletismo, piscinas, pabellones polideportivos cubiertos, Casa de la Cultura, Instituto de Estudios Valdeorreses, Centro Social, parques infantiles y áreas de recreo.

Las principales vías de comunicación son la carretera N- 120 y la línea férrea Palencia- A Coruña. Tiene estación de RENFE y de autobuses .

El popular Malecón es un largo paseo fluvial para el recreo y las grandes convocatorias festivas, además de lugar de encuentro, conversación y juego.

FIESTAS
DESCENSO DEL SIL EN PIRAGUA

O Barco celebra sus fiestas mayores el 14 de septiembre en honor al Cristo. En esta fiesta, se celebra el popular descenso del Sil en piragua, regata internacional que parte del histórico puente de Sobradelo.
IGLESIA ANTIGUA DE O BARCO

También es fiesta el 22 de mayo, día de Santa Rita; San Mauro, el 15 de enero y San Roque, el 16 de agosto, además de otras fiestas estacionales como los carnavales, a Festa dos Maios ( uno de mayo) y los Magostos, durante el mes de noviembre.

El día 5 de enero se celebra la Cabalgata de Reyes.


LUGARES PARA VISITAR
CASA GRANDE DE VILOIRA

1.- Casa Grande de Viloira, espléndido edificio de 1637, siempre ligado al linaje de los Quiroga, con su romántico parque de estilo francés.

En la plaza de Otero Pedrayo, junto a la Casa Grande, se celebra la feria del día 6 de cada mes , donde comer una tapa de pulpo es un ritual obligado.

2.- Iglesias, Casa do Concello, calles, plazas y comercios.

3.- El Malecón con sus parques y jardines y el río Sil que baja caudaloso y rugiente.
INTERIOR DE LA IGLESIA DE XAGOAZA
ARCO DEL MONASTERIO DE XAGOAZA

4.- A pocos km. de O Barco, podemos visitar el Monasterio de Xagoaza , antiguo priorato de la Orden de San Juan de Jerusalén, en cuya fachada se contempla la Cruz de la Orden de Jerusalén.
VISTA DEL MONASTERIO

INTERIOR DE LA IGLESIA

Este Monasterio está situado junto a la iglesia de San Miguel,
IGLESIA DE XAGOAZA

de ábside románico, en un bello paisaje y una magnífica arboleda, en el que también se encuentra la vieja bodega de los frailes, restos de un molino y un antiguo puente sobre el río Mariñán .
PAISAJE DE XAGOAZA

5.- Otro lugar, digno de visitar es A Vila de O Castro, que fue cabeza de jurisdicción, hasta quew el pueblo asentado en las orillas del río Sil fue ganado protagonismo.

En O Castro, destacan los restos de su castillo fortaleza que los Reyes Católicos concedieron con todo el señorío de Valdeorras a los condes de Rivadavia por su participación en la conquista de Granada ; luego pasó a los condes de Lemos y al marqués de Villafranca.
CASA GRANDE DE O CASTRO

Dos pazos destacan en O Castro: la llamada Casa Grande, junto a la fortaleza, y el pazo de Flórez , magnífica construcción señorial de 1630.



GASTRONOMÍA


El visitante puede almorzar en alguno de los numerosos restaurantes de O Barco, degustando los platos típicos , como:

El “ Botelo”( estómago del cerdo, lleno de carne adobada , sal, ajo y orégano, y curado al humo que se acompaña de patatas cocidas y se riega con un tinto joven de mencía), las “ androllas”, truchas del Sil, asados de cabrito, empanada, “ pulpo a feira” ( puede degustarse en el mercado, el día 6 de cada mes , en la plaza de Viloira), la “ castaña”, todo regado con el vino de origen Valdeorras: tinto de mencía o blanco de godello, para terminar con una copa de aguardiente elaborada en los alambiques de O Barco.


martes, 18 de marzo de 2008

Ruta de Mones a Petín y A Rúa

RUTA DE MONES A PETÍN Y A RÚA


Lugares : San Miguel de Mones, Campelo, Compedriña, Carballal, Petín, A Rúa.

Distancia: aproximadamente,6 km. ( 12 ida y vuelta)

Tiempo estimado: 3 h., 30 minutos, ida y vuelta, andando; 30 minutos , ida y vueltas , en coche .

Desnivel: 638 m.
VISTA DE PETÍN DESDE MONES

La primera noticia escrita que tenemos de Petín data del 29 de agosto del año 1090. En esta fecha, Ero Gutiérrez hace una donación de propiedades en diversos pueblos, entre los que figura Petín, a la catedral de Astorga y a su Obispo D. Osmundo.

Si nos situamos en el puente de A Cigarrosa, veremos, en la margen derecha del río, una pequeña elevación del terreno en el lugar donde se ubica actualmente el colegio privado “ Pablo VI” . Según opinión general, confirmada por abundantes restos arqueológicos, aquí estuvo el emplazamiento del antiguo Forum Gigurrorum ( Foro ) que fue un importante núcleo de población y la capital del país de los gigurros. En principio, más que poblado, fue mercado y reunión de las aldeas vecinas donde periódicamente acudían las gentes para comprar y vender y para tratar asuntos comunes o privados.

Posteriormente, la gente se asentó aquí dando origen a una población fija que siguió llamándose Forum Gigurrorum y, luego, en recuerdo de su primitivo origen, Cigarrosa. Por este lugar, por Forum Gigurrorum, pasaba la Vía XVIII que era el tercero de los caminos militares romanos que iban de Braga a Astorga. Esta Vía unía Braga a Astorga a través de la provincia de Orense y figura en el Itinerario de Antonino, redactado en época de Caracalla ( 196 - 217 d. de C., con el nombre de Item Alio Itinere a Braca Asturica. La construcción de esta Vía se terminó en el año 80 d. de C., bajo el reinado del emperador Tito.

En los miliarios, figura con el nombre de Vía Nova por ser la más moderna de las vías romanas de Galicia. A esta Vía pertenecía la mansión VIII ( Foro ) que estaba situada en Forum Gigurrorum. Las mansiones eran lugares de descanso donde se relevaban los correos, se cambiaban los carruajes y las bestias de tiro y se utilizaban como posadas de viajeros.

Otra importante obra, es el puente de A Cigarrosa que , como puede observarse, comunicaba y comunica ambos márgenes del río Sil. Este puente, tal cual lo vemos ahora, no es el primitivo romano. Existió otro anterior del cual se conservan algunas hiladas de sillería que, seguramente, son obra romana. Sobre ellas se construyó, por Juan de Nereda, en 1577, un puente que reconstruido en el siglo XVIII, es el actual.
IGLESIA ACTUAL DE PETÍN
En las excavaciones, realizadas por la Comisión de Monumentos de Orense en 1896, a uno y otro lado del río Sil, a la altura de este puente, dentro del emplazamiento de Forum Gigurrorum, se han encontrado abundantes restos arqueológicos que, algunos, se conservan en el Museo Arqueológico Provincial de Orense.
MOSAICO DE A CIGARROSA

En A Cigarrosa, se encontró, en tiempos próximos a 1680, una lápida que , actualmente, después de muchas vicisitudes, se halla empotrada en la pared de una casa contigua a la iglesia de San Esteban de A Rúa Vella de Valdeorras. La lápida, que se conserva en buen estado, recoge la historia de Lucio Pompeio Reburro, ilustre valdeorrés que vivió hace 2000 años. El texto de la lápida es el siguiente:
LÁPIDA DE A CIGARROSA

L POMPEIO L F/ POM REBVRRO FABRO
GIGVRRO CALVBRIGEM
PROBATO IN COH. VII PR.
BENEFICIARIO TRIBVNI
TESSERARIO IN
OPTIONI IN
SIGNIFERO IN
FICI CVRATORI
CORN TRIB
EVOC AVG
L FLAVIVS FLACCINS
EX. T.



“Lucio Flavio Flacino, heredero testamentario, dedicó este monumento a Lucio Pompeyo Reburro Fabro, hijo de Lucio, de la tribu Pomptina, natural de Calúbriga en los Gigurros, aprobado en la cohorte VII pretoriana, beneficiario del Tribuno, teserario de centuria, vicecenturión, portainsignia de centuria, procurador del fisco, corniculario del Tribuno, evocado del emperador”.

En el lugar llamado el Pombar, en la margen izquierdo del río Sil, se han descubierto sepulcros, restos de construcciones, mosaicos que representan pescados de formas variadas, conchas, estrellas de mar, un crinale, fíbulas, pesas, tesérulas, monedas, herramientas (… ). En el paraje denominado Valdegodos, existen petroglifos.

En la época sueva, en Georres o Giorres, como entonces se llamaba a Forum Gigurrorum ( Foro ), se acuñaron monedas de los reyes Witerico ( 603 - 610 , Sisebuto ( 612 - 625 ) y Suintila ( 621 - 631 ). El Parroquial Suevo del año 569 menciona la parroquia de “Gerros”.

Alfonso III repobló y dotó de iglesias a las tierras saqueadas por los árabes, entre otras, “ Geurres”.

Las tierras de Valdeorras y, por tanto, las del municipio de Petín y A Rúa, durante la Edad Media, estuvieron dominadas por los condes de Lemos. A finales del siglo XV, los Reyes Católicos concedieron, a los Condes de Rivadabia, el señorío jurisdiccional de Valdeorras que mantuvieron hasta el siglo XIX.

En la Guerra de la Independencia, durante la segunda quincena del mes de enero de 1809, los franceses fueron atacados por los vecinos del Valle en el puente de Petín. Después de derrotarlos, les hicieron huir hacia tierras del Bierzo. Destacaron, en esta acción, las valerosas mozas de Petín y otros lugares que se abalanzaban, antes que los hombres, a los dragones franceses sin miedo al sable desnudo que amenazaba sobre sus cabezas, acuchillando franceses, con la mayor bravura . El 11 de junio de 1809, las tropas francesas que se retiraban de Galicia hacia tierras zamoranas acamparon en la ermita de San Roque de A Rúa y durante 10 días saquearon Petín, donde quemaron 43 casas, y los pueblos de Portela, Carballal, Mones, Sampaio, Santa María y Castrofolla.

El río Sil fue célebre por las pepitas de oro que se encontraban en sus aluviones. Las mujeres, llamadas aureanas, cribaban las arenas en busca de las preciadas pepitas. A pocos km. de aquí, está el lugar llamado Montefurado donde los romanos perforaron el monte para hacer pasar por un túnel el río y así recoger las pepitas depositadas en las arenas de un recodo que quedaba sin agua.

El agua del embalse de San Martín ha cubierto tierras muy fértiles de Petín. Hoy, sobre estas tierras cubiertas de agua, se practican deportes náuticos y en su orilla, que baña tierras de A Rúa, se ubica el complejo deportivo O Aguillón.

Petín y A Rúa es tierra de viñedos . La bodega Medorras S.A. , situada en este lugar, embotella mencia con el nombre “ Viña Lardeira” y “ Viña Lardeira Oro “ y godello con el de “ Godellón” y “ Godellón Oro”. La Cooperativa Virgen de las Viñas en A Rúa tiene una capacidad de 8 millones de litros.

Además del puente de A Cigarrosa, en Petín, podemos pasear por sus calles y contemplar sus casas, ( unas antiguas, otras modernas), sus espaciosos chalets y sus bodegas. Su plaza Mayor, donde se celebran las fiestas de su patrón Santiago Apóstol el día 25 de julio, está rodeada de viejos edificios de los cuales destaca la casa solariega de la familia Quiroga. En ella, vivió y paso consulta, el médico D. José Quiroga que alcanzó, en aquella época, merecido prestigio y fama entre los vecinos del municipio, no sólo por sus conocimientos técnicos, si no también por el trato humano a los pacientes. Su hijo, D. José Quiroga, también médico, fue el primer presidente de la Preautonomía Gallega.

Muy cerca de la plaza Mayor, se encuentra la Iglesia, la casa Rectoral y la del Concello que también podemos visitar, así como saborear un vaso del buen vino del país y comprar, en los bares de la plaza, unas botellas de vino de marca de mencia o godello de la bodega Medorras S.A.


DÍA 7 DE CADA MES: FERIA DE A RÚA
VISTA DE A RÚA DESDE MONES
En las ferias de antaño, en el puente de A Cigarrosa, se juntaban las gentes, procedentes, de San Miguel de Mones, Santa Olaia, Sampayo, Santa María de Mones, O Seixo, Carballal y Petín, que iban a la feria, con las de los pueblos de Portomourisco, A Portela, Freixido, Larouco y Seadur.

El puente de A Cigarrosa, testigo de la muy importante presencia romana en estas tierras, que comunica ambas orillas del río Sil y que aquí circula tranquilo, calmoso y profundo, es largo y estrecho. Antes de construir el puente nuevo, era la única vía para cruzar el río. Soportaba todo el tráfico de personas, animales y automóviles que circulaban simultáneamente por él. Hoy existe otro puente por el que transita todo el tráfico rodado: es el puente nuevo de A Cigarrosa. Antes de construir este puente, el paso , especialmente los días de feria, podía resultar complicado. Caballerías, bueyes, vacas, terneros, perros, hombres, mujeres y niños, coches, camiones, autobuses y carros, lo transitaban todos juntos y revueltos. El rugido y las bocinas de los automóviles, la aglomeración de la muchedumbre, a veces, inquietaba y ponía nerviosos a los animales que se encabritaban y espantaban en aquel reducido espacio, desde donde se veía, allá abajo, las tranquilas, pero peligrosas aguas del río Sil. !Cuántas veces, asustados, ante situaciones de inminente peligro, el corazón del transeúnte latía frenéticamente, le temblaban las piernas y un color cerúleo invadía su piel que ya presentaba los pelos de punta y la típica carne de gallina ¡.

Al inicio de A Rúa, se unía, a la carretera principal, la gente procedente de Rublido y Quiroga que también venía llena de animales y personas. La calle principal de A Rúa, limpia, asfaltada, con sus casas alineadas, sus puertas, paredes, balcones y ventanas pintadas; sus tiendas, comercios y bares abiertos, se abarrotaba con aquella muchedumbre que solamente, de cuando en cuando, viajaba al lugar. Contemplar aquello les producía un fuerte impacto por contraste con lo que había en sus aldeas de procedencia. A los ojos de los asombrados labriegos, aquello les parecía que estaban en un mundo idílico, mágico, extraño y diferente. Impresionaba observar aquella riada de personas, animales y coches circulando monótona y pausadamente, todos revueltos, por la calle principal de A Rúa. Por ella, caminaban animales jóvenes, viejos y de mediana edad; unos con el pelo negro, otros de color castaña, otros bragados. Iban sueltos o uncidos al yugo con cornales y mullidas. Caminaban inquietos en medio de aquella algarabía, de vez en cuando, mugiendo y expulsando sus excrementos; espantando continuamente las molestas moscas y tábanos con el movimiento de sus rabos, orejas, patas y cabeza.

Iban también gentes humildes y sencillas hablando, a veces, de cosas serias, a veces, de cosas triviales; jóvenes y esbeltas muchachas de melancólicos ojos azules o mirada chispeante que llevaban vistosos vestidos y andaban sueltas, graciosas y ligeras como andan las gacelas; señoras maduras y entradas en años, mayormente con ropas de luto, vestidos que descendían hasta los tobillos, cabellos cubiertos con pañuelos de seda y calzadas con galochas, zuecos, “madrueñas”, zapatos, zapatillas o alpargatas; varones de todas las edades, pacíficos o irritados, altos o bajos, listos o torpes, taciturnos o locuaces, guapos o feos, a veces, con boina, gafas, bigote y cayada, vestidos, frecuentemente, con pantalones y chaqueta de pana, camisa sin cuello ni corbata, metidos en carnes y redondeado abdomen o esbeltos y delgados como jirafas. A Toda esta muchedumbre, había que añadir los muchos viajeros que iban o venían en tren . En aquella época, cuando se quería viajar en ferrocarril, solamente se podía hacer por la vía férrea que pasaba por A Rúa y que comunicaba Galicia con el resto de España. Por este motivo, las gentes de los municipios de A Veiga do Bolo, Viana, O Bolo, Trives y Larouco que querían viajar en ferrocarril tenían que venir hasta A Rúa. A Rúa era entonces un hervidero de gentes que iban y venían, compraban y vendían: era el centro nuclear de la región, con mucho tráfico y movimiento comercial. La vía férrea de Zamora a Orense y el auge del tráfico rodado por carretera desplazó a la Gudiña una buena parte de los viajeros y mercancías de estos municipios.

Los coches avanzaban lentos y perezosos por la calle principal. Tocaban sus bocinas continuamente, pidiendo espacio por donde circular. Rugían sus motores y expulsaban gases venenosos sin parar.

Los comercios se llenaban de gentes que compraban cosas para su hogar. Los bares se atiborraban con la multitud que bebía vino del país, tomaba un refresco o café con aguardiente. A Rúa estaba viva, dinámica, bulliciosa y alegre al tiempo que se enriquecía con aquel ir y venir, entrar y salir, comprar y vender de los campesinos.

A veces, esta multitud que circulaba por la calle principal se incrementaba con los compradores de ganado que deseosos de conocer, lo antes posible, las ofertas y los precios se iban a los caminos y carreteras por donde transitaban los animales , esperando sorprender a los dueños y comprar a bajo precio., tal vez más barato. Así se desplazaban hasta el mismo puente de A Cigarrosa.

En la misma entrada del recinto ferial, se juntaban con las gentes y ganados procedentes de los pueblos de Cernego, San Vicente, Somoza, Villamartín, Valencia del Sil, San Miguel de Outeiro, Correxais, Arcos, Arnado, Córgomo (… ).

En el recinto ferial, los animales con sus dueños iban ocupando los espacios vacíos hasta que se llenaba completamente. El panorama ferial resultaba muy pintoresco. Allí convivían bueyes, vacas y terneros: grandes, pequeños y medianos; unos de color castaña, otros negros o pardos y otros bragados que mugían continuamente, juntos o separados, y se movían inquietos soportando los ruidos, moscas y mosquitos. Por allí, se movían curiosos compradores y vendedores que hablaban a gritos para ser escuchados, en aquel ruidoso escenario. Allí gritaban los comerciantes, ofreciendo sus mercaderías y productos variados: jarras, platos, cucharas y tenedores; cantaras de cobre o de barro; cuchillos, navajas, hoces y guadañas; sierras, azadones y azadas; sartenes, cazuelas y hoyas; hilos, agujas, cremalleras y lanas; zapatos, zapatillas, alpargatas, galochas, madrueñas y clavos ( … ). Pero, lo más emblemático de la feria, eran las vendedoras de pulpo. Se ubicaban en la parte alta del recinto ferial. Sobre potentes y resistentes trébedes de hierro colocaban sus enormes calderos de cobre con agua que hervían con la lumbre de la leña de los árboles del entorno. Dentro introducían y cocían el pulpo que removían, constantemente, con un palo. Hasta allí, se acercaban los paisanos que querían comer una ración de pulpo. La vendedora de pulpo sacaba el cefalópodo del caldero; hábilmente lo troceaba con unas resistentes tijeras de acero; lo colocaba sobre platos llanos de madera o de barro; lo aderezaba con sal, aceite y pimiento picante y se lo ofrecía a los clientes que lo comían de pie con pan y un buen jarro de vino. ¡ Pulpo, caliente y sabroso, divino pulpo, manjar exquisito de las ferias de ganado, con cuánto placer te consumían las sencillas gentes que habitaban estos poblados ! El humo de las hogueras, el olor de los calderos donde se cocía el pulpo se expandía por el recinto ferial y hacía que las glándulas salivares, estimuladas por el olor, produjeran saliva sin cesar. Esto era un potente reclamo que incitaba a los feriantes a comer pulpo. La cultura del pulpo estaba tan arraigada que ir a la feria y no comer pulpo era tanto como confesarse pobre, tacaño o raro.

Los compradores de ganado, vecinos de pueblos cercanos o mayormente bercianos, iban y venían, subían y bajaban por el recinto ferial, viendo atentos el ganado. Se fijaban en los cuernos, observando si eran grandes o pequeños, paralelos o desviados; en los ojos, si estaban sanos o enfermos; en los dientes, si tenían alguna mancha o defecto y para deducir la edad del animal; en las patas, si andaban bien o cojeaban. Preguntaban por su precio:

¿ Qué vale, Cuánto vale, qué pides ?. Preguntaba el comprador.
10, 20, 30 mil reales, contestaba el vendedor. ( en aquella época el precio se fijaba en reales )

Si el comprador estaba interesado en la compra del animal, empezaba el regateo

¡ Qué barbaridad, te has pasado, esto es mucho !

Son buenos, mansos, jóvenes, sanos y gordos. ¿ Cuánto das tú ?, contestaba el vendedor.

El comprador ofrecía, generalmente, una cantidad baja para dar lugar al regateo . El vendedor la rechazaba. El comprador se alejaba haciendo ver que no le interesaba. Pero al poco tiempo volvía y decía:

Bueno, ¿ en cuánto lo pones, di tu última palabra ?
Normalmente, el vendedor bajaba algo el precio.
Te doy tanto, y esta es mi última oferta. La diferencia se acortaba. Llegados a este punto, solía aparecer algún o algunos mediadores que animaban a comprador y vendedor a cerrar el trato.
Ni lo que dice uno, ni lo que dice el otro. Hay que partir la diferencia por la mitad, decía el mediador. Si aceptaban la mediación, se cerraba el trato con un apretón de manos, entre comprador y vendedor. Y esto tenía el valor de una firma notarial. Romperlo era intolerable, de consecuencias imprevisibles y deshonroso . No había vuelta atrás. La palabra dada era sagrada.

Una multitud de curiosos presenciaba la escena. El vendedor pagaba la robla, invitando a un vaso de vino y unas tapas de pulpo.

Terminada la feria, volvían los campesinos a sus pueblos y hogares, por el mismo camino que habían recorrido por la mañana. Unos, con el dinero de la venta bien escondido, en las partes más inverosímiles de su ropa o de su cuerpo: pretendían evitar el robo que, algunas veces, por el camino, llevaban a cabo los bandoleros. Otros regresaban con el ganado comprado o con el no vendido. La feria había terminado, aunque en el recuerdo continuaría viviendo durante mucho tiempo.

Ahora no hay ganado, ni compradores, ni vendedores, ni regateos, ni intermediarios, ni roblas, ni ferias de ganado. Avanzamos, progresamos, pero por el camino dejamos una buena parte de las raíces que heredamos. Pero nos preguntamos. ¿ somos quizá más felices ?



ACTUALIDAD

En la actualidad, A Rúa, tiene 5.100 habitantes. Está bien comunicada por carretera, a través de la N- 120; C-546, hasta Ponferrada y C- 533 que lleva hasta Viana, Gudiña y Portugal. Por Ferrocarril, se comunica con Galicia y el resto de España. La estación de ferrocarril tiene un importante movimiento de viajeros y económico, especialmente, LA EXPORTACIÓN DE LA PIZARRA..

El sector terciario ocupa el 52,41% de la población: comercios, bancos, hostelería y enseñanza.
La industria local emplea el 21%, destacando la hidroeléctrica: Iberdrola tiene, en A Rúa, un centro regional desde 1945.

Las explotaciones agrícolas se centran en el cultivo de la vid y la castaña, pero también son abundantes los frutales y las huertas.

El viñedo ocupa 435 hectáreas, con denominación de origen Valdeorras. Existen muchas bodegas particulares y la Cooperativa Virgen de la Viñas, con 8 millones de litros de capacidad. Entre las variedades producidas, destaca godello y el tinto mencia.


En cuanto al turismo, sobresale el embalse de San Martiño que en O Aguillón tiene: pabellón polideportivo, piscinas al aire libre, canchas de tenis, embarcadero, campo de fútbol de hierba y de tierra. En él, se pueden practicar actividades como: piragüismo, vela, pesca, etc. También se puede hacer turismo de montaña en: Serra de Cereixido, Cabalos y Enciña da Lastra.


En el patrimonio arqueológico, existen restos prehistóricos de las Mamoas, en Roblado; los Petroglifos de A Rúa Vella y los Castros en Vilela, además, de las lápidas y mosaicos romanos de A Cigarrosa, donde estuvo situado Forum Gigurrorum y la mansión VIII, Foro. Por aquí pasaba la Vía XVIII o Vía Nova que unía Braga con Astorga.

Hay muchos comercios, bancos, supermercados, bares, pubs, restaurantes, hoteles.

Se celebran fiestas como:
- San Antonio en Fontei el 13 de junio.
- -Virgen de Fátima, 13 de mayo.
- Fiestas de verano.
- Fiesta de San Roque, en A Rúa Vella.
- Jornadas de folklore Internacional.
- Fiesta del Magosto, en la Plaza de la Estación el uno de noviembre

Los día 7 de cada mes, es día de feria en Fontei. Antes era de ganado, ahora es, principalmente, un grande mercadillo donde se compra y vende de casi todo.
Lo más tradicional de la feria es comer el pulpo y la empanada. Pero hay, también platos típicos, como:



Cocido: garbanzos, patatas, pezuña de cerdo, ternera, lacón. Chorizo, orejas y soá
Androllas, choupis ( setas), empanada de raxo ( solomillo), torta de rixós, leche frita, torrexas, etc.
EN LA FERIA, EL PULPO
En Petín, se celebra la fiesta de Santiago el día 25 de agosto y feria el 21 de cada mes..

jueves, 13 de marzo de 2008

Mones en la Región de Orense

Un grupo de Petín crea el ‘club de amigos’ de Mones para evitar la desaparición del pueblo
Su primera medida será una marcha a pie de 220 kilómetros desde A Coruña hasta su lugar natal
Menéame Technorati Chuza! Enchílame J.C. - O Barco - 12-03-2008 Un grupo de petineses recorrerá a pie los 220 kilómetros que hay entre A Coruña y el pueblo de Mones para intentar frenar el proceso de despoblación que sufre este pueblo. Lo anunció uno de los promotores de esta peculiar marcha, Francisco Blanco. Afincado en la ciudad herculina, apunta que en ella se estableció una importante “colonia” de personas nacidas en Petín. Pero su objetivo es “dinamizar la vida del pueblo de Mones”. La creación del Club de Amigos y la organización de actividades buscan lograrlo.

Mones (Petín)El pueblo de Mones (Petín) perdió un centenar de vecinos en las últimas cinco décadas y actualmente sólo viven en él 20 familias. El proceso de despoblación amenaza con convertirlo en un “pueblo fantasma”. Al menos, así lo estima Francisco Blanco, un petinés que actualmente vive en A Coruña, donde existe una importante “colonia” de personas oriundas de Mones. Esta circunstancia fue la que le llevó a elegir la ciudad herculina, y más concretamente la plaza de María Pita, como punto de salida de una marcha a pie para reivindicar su pueblo natal.

Francisco Blanco prefiere no aventurar el número de participantes en esta marcha, que recorrerá 220 kilómetros y que tiene su final en Mones. La fecha aún está pendiente de ser fijada de forma definitiva, aunque podría desarrollarse entre el 27 de junio y el cinco de julio.

Francisco Blanco indica que cada uno de los nueve tramos finalizará en el consistorio del concello en el que se encuentren los caminantes, buscando reunirse con el alcalde para informarle de su propósito.

El trazado preparado inicialmente por los organizadores discurre por Lugo, Sarria, Monforte y A Rúa. Para iniciar la marcha, los organizadores solicitaron y obtuvieron el permiso de la Guardia Civil.

“Para la llegada a Mones pretendemos reunir al mayor número de personas posible”, apunta Francisco Blanco, quien añade que el final de la larga caminata coincidirá con el inicio de una comida popular en el pueblo.

Esta marcha no es la única actividad promovida para “dinamizar Mones”. Recientemente, fue creado el Club de Amigos del pueblo, cuya legalización ya se está siendo tramitada y que pretende incluir entre los socios al pueblo asturiano que lleva su mismo nombre de Mones.

Los planes de estos petineses no se detienen aquí, pues pretenden desarrollar un amplio programa de actividades, entre las que incluyeron la recuperación de juegos -como los bolos o la billarda-, el fomento del senderismo y la organización de charlas sobre la historia, la sociedad, los trabajos o las tradiciones religiosas y festivas del pueblo.

Más ambiciosos son sus planes de desarrollar faenas agrícolas colectivas, como la siega del centeno, o la creación de un museo etnográfico. Su objetivo último es lograr la remodelación de las casas y conseguir que una empresa abra un restaurante o una casa de turismo rural.
Comentario de: Galileo Reportar abuso Jueves 13/03/2008 a las 9:10Gigurro, tienes mucha razón cuando los chavales tienen una edad… no hay manera. Sin embargo, creo que eso no sería tan sangrante si por lo menos hubiera un transporte público en condiciones, no solo para que los jóvenes tenga mayor libertad a la hora de salir de la aldea sino también para la gente mayor que aún viven en las mismas. Se necesita con urgencia transporte público para dar servicios a los habitantes de las aldeas que tiene que ir al médico, a la compra y, también, necesidades de ocio, pero lo que hacen es todo lo contrario… Veo que cada vez las aldea están más aisladas que nunca con las grandes villas, como O Barco o Viana do Bolo, y eso hace que estén condenadas a desaparecer. Spam Lenguaje Inadecuado Injurias o calumnias #7 Comentario de: MARY Reportar abuso Miércoles 12/03/2008 a las 23:43YO estoy de acuerdo con MIRIAN es un pueblo maravilloso,precioso yo vivo en ORENSE y claro me queda un poco lejos, pero esa tranquilidad y reposo es especial,yo disfruto cada vez que voy,y quisiera ir mas pero claro el trabajo obliga a no estar mas tiempo en el pero cuando voy,es una delicia estar alli. Spam Lenguaje Inadecuado Injurias o calumnias #6 Comentario de: Marta Reportar abuso Miércoles 12/03/2008 a las 19:00Hola, yo no creo que el objetivo sea que la gente vuelva a vivir a Mones, sino que los hijos de, nietos de, no pierdan la buena costumbre de ir a su aldea unos dias en verano, durante las fiestas patronales,...
Como se comenta ahi, mucha gente se marcho de Mones a vivir otros lugares, yo creo que la situación de aquellos tiempos casi obligaba, cuando no a irse al extranjero pues a irse a otra provincia, mucha gente de Mones está en La Coruña y en Orense. En cambio desde hace unos años para aqui se les ha dado por irse para la Rúa o para El Barco, y yo eso si lo veo menos justificado, en los matrimonios jóvenes, pues si tu hijo/a quiere salir, pues se puede quedar en casa de un amigo que tenga en la Rúa, todos lo hemos hecho, y cuando son mozos y quieren una cierta libertad pues quien no ha tenido una vespa o similar para ir de pueblo en pueblo?
Adoro Mones, me gusta en aire que allí se respira y se lo recomiendo a todo el mundo, es muy relajante. Spam Lenguaje Inadecuado Injurias o calumnias #5 Comentario de: gigurro Reportar abuso Miércoles 12/03/2008 a las 17:58De todas maneras, llama un poco la atención de la iniciativa de Mones ¿quieren revitalizarlo los hijos del pueblo que se han ido de él? ¿Por qué no se quedaron ellos a hacerlo grande y trabajar por él? ¿Qué quieren? ¿Condenar a los que se han quedado a hacer de guardeses del cortijo para que se lo tengan limpio y ordenadito (y ahora también animado) cuando vuelvan ellos su mes de vacaciones? Spam Lenguaje Inadecuado Injurias o calumnias #4 Comentario de: gigurro Reportar abuso Miércoles 12/03/2008 a las 17:54Muchos de mis vecinos de la aldea han aguantado en ella hasta que sus hijos han sido mozos de 15 ó 16 años. Los chavales quieren empezar a salir, y el padre no va a estar pendiente el sábado de irlos a llevar a O Barco (y mucho menos de irlos a recoger) y no está para fiarse de que vaya con otros chavales del pueblo (los pocos que quedan) en coche por lo que todos sabemos. Así, terminan dando su brazo a torcer; cambia toda la familia la casa llena de sitio por el piso de cien metros (en el mejor de los casos) y el padre y la madre dejan a los hijos el fin de semana en O Barco y ellos suben a la aldea a trabajar la huerta y la viña. Ése es todo el misterio Spam Lenguaje Inadecuado Injurias o calumnias #3 Comentario de: Galileo Reportar abuso Miércoles 12/03/2008 a las 17:33Gigurro, es verdad que en cuanto a servicios y ofertas de ocio las aldeas no pueden competir con las urbes, sin embargo, tienen otros atractivos a tener en cuenta como un entorno privilegiado, una vivienda muchísimo más barata y con las mismas comodidades que las de las urbe, y una calidad de vida qué más quisieran muchos. Además, hoy por hoy las distancias no existen… no es como antes, ahora todo el mundo tiene coche y hay familias que hasta dos, un la mujer y otro el hombre. Por estas razones, no entiendo como muchos jóvenes abandonan su pueblo de origen para irse a vivir a un piso, normalmente pequeño, que para colmo no esta tan lejos de su pueblo y que igualmente tiene que coger su coche para ir a trabajar ¿ ? No lo entiendo y me da una gran pena. Spam Lenguaje Inadecuado Injurias o calumnias #2 Comentario de: gigurro Reportar abuso Miércoles 12/03/2008 a las 15:40No te engañes, Mirian, no depende del trabajo. En la pizarra, en el municipio de Carballeda hay todo el trabajo del mundo, y los de las aldeas, se van a vivir a O Barco aunque después pasen todos los días en el Land Rover camino de la cantera por delante de su casa del pueblo después de madrugar media hora más y teniendo que llegar a su casa media hora más tarde al final de la jornada. El municipio, excedentario en trabajo, sigue desangrándose en población desde los años 50 ¿Vistas? Se ve medio mundo desde casi todos los pueblos del municipio ¿Riqueza ambiental? A pesar de la pizarra aún hay mucha y variada ¿Tranquilidad? Más que en muchos cementerios
¿Por qué sigue la gente, entonces, yendo a vivir a O Barco, que un amigo que me visitó un día dijo que parecía "un pueblo minero del Far West, con su calle central y la estación de tren"?; pues porque hay servicios, sobre todo sanitarios, educativos y una oferta de ocio que no tienen las aldeas, y hay cosas sin las que se vivía en los años 40, pero hoy no Spam Lenguaje Inadecuado Injurias o calumnias #1 Comentario de: mirian Reportar abuso Miércoles 12/03/2008 a las 14:54Debería haber máis xente nestes pobos, pero eso non depende da xente so, senon tamén do traballo que exista na zona.
Mones é un pobo que está a 10 min. escasos da Rúa e hai que promover as casas rurais, rutas de sendeirismo ou a cabalo, etc
É un pobo cunhas vistas preciosas e pódese exprimir moito del. Escribe tu comentario